10 años: En el caso de fallas o defectos que afecten a la estructura soportante del inmueble, tales como cimientos, sobrecimientos, fundaciones, muros soportantes, losas,vigas, cadenas, pilares, techumbres, y entramados horizontales o verticales de carácter estructural.

5 años: cuando se trate de fallas o defectos en los elementos constructivos o de las instalaciones, tales como ; cubiertas de techumbres, ventanas, estructuras no soportantes de muros y cielos, bases de pavimentos, estructuras o bases de pisos, impermeabilizaciones, aislamiento térmico y acústico, redes de instalaciones, tales como corrientes débiles, de calefacción, climatización, de gas, sanitarias, húmedas y secas de incendio, de evacuación de basuras, instalaciones y equipos eléctricos mayores, como ascensores, equipos de presurización, calderas colectivas y equipos electrógenos

Un plazo de 3 años, en el caso que hubiesen fallas o defectos que afecten elementos de terminaciones o acabado de las obras, tales como, cielos, pisos, puertas, revestimientos y pinturas interiores o exteriores, barnices, alfombras, cerámicos, quincallería muebles adosados o empotrados a la construcción.