Cuando llegan los días fríos, además de poder visionar los atardeceres más impactantes del año desde tu Vimac o el rincón de la ciudad que prefieras, recordamos que es tiempo de cambiar la ropa que utilizamos en el día a día y acondicionar nuestro hogar para hacer frente a las bajas temperaturas de la manera eficientes.
Es por eso que te recordamos cinco aspectos que deberías considerar si quieres disfrutar este invierno desde tu hogar sin gastar demás
Ventila tu hogar por las mañanas:
Cuando el aire húmedo del interior de la casa toca las paredes o los vidrios que están fríos, se convierte en agua, escurriendo por muros y ventanas. Eso se llama condensación, y para combatirla se recomienda abrir todos los días las ventanas en la mañana para que circule el aire, por un período breve de tiempo. La condensación aumenta a través del vapor que genera la ducha o cuando se cocina o seca la ropa dentro de la casa.
Revisa el sellado de ventanas y puertas:
Hacer mantenimiento, evita que el calor del interior de tu hogar se fugue hacia el exterior y que el frío y el viento se cuelen dentro tu departamento. Es importante revisar y limpiar las perforaciones que tienen los rieles de las ventanas, que están diseñadas para evacuar el agua lluvia o el líquido que escurre por los vidrios producido por la condensación. Los sellos se deben revisar todos los años. La mejor forma de detectar que ya no sirven, es cuando pierden adherencia o se empiezan a ver cortados.
Utiliza la calefacción de un modo eficiente:
Hoy existen en el mercado diversos modelos de estufas a gas, parafina o eléctricas que pueden calentar tu casa, sin embargo, vale la pena considerar que el gas produce vapor que se va a las paredes y eso forma hongos y humedad, por eso, se recomienda usar calefacción porque no produce condensación del aire y por supuesto, no mantenerla encendida todo el día.
Revisa las canaletas
Cada vez que llueve, es importante revisar las canaletas de tu balcón, ya que está diseñada para evacuar y canalizar el agua lluvia fuera de tu hogar. Si estas no se limpian, se generan filtraciones o acumulación de agua o humedad que podrían dañar la vivienda. Si las canaletas se mantienen despejadas y sin barro, pueden durar más.